El silencio / Juan Valencia Asuad

El silencio

11.1.3

Introducción, podemos ver el comienzo del ensayo en el momento donde nos formulan una serie de preguntas relacionadas con el silencio y algunas características de este; empiezan describiendo el problema como el odio de la sociedad occidental hacia el silencio, nos demuestran como las personas “matamos” el silencio, independiente de tu trabajo siempre tatas de evitar el silencio como lo demuestra los ejemplos de un vendedor, un conductor y un hombre y mujer normal.

Cuerpo, el cuerpo podemos identificarlo cuando empieza el ensayo a darnos bibliografías y desarrolla la idea principal, como lo hizo cuando nos ejemplificó dos de los más grandes escritores como el filosofo griego Epicteto y el escritor belga Maurice Maeterlink mostrando de forma envolvente sus pensamientos acerca del silencio como; Guardar silencio la mayor parte del tiempo, existe un momento para callar y otro para hablar.

Conclusiones, estas son especialmente sencillas de identificar, puesto que están al final del texto en este caso y se empieza el párrafo final con una frase usada para exponer ideas finales como es “para terminar” y nos habla en este caso de una forma poco especializada ni desarrollada lo que pueden presentar algunos textos de psicología clínica y enseñanzas de líderes espirituales.

11.1.4

La idea central del ensayo fue la capacidad que nosotros como la sociedad occidental tenemos para matar el silencio en cada momento de la vida; los argumentos dados en el ensayo fueron, ejemplos como; conductores de vehículos suprimiendo sus silenciadores, hombres y mujeres comunicándonos con voces chillonas y estridentes en todo lugar, el intento inconsciente por asesinar a nuestro enemigo oculto “silencio”, obras y trabajos y preguntas realizadas por filósofos, psicólogos, sacerdotes, líderes espirituales y maestros.

11.1.5

El punto de vista propuesto por Juan Valencia Asuad es claramente evidenciado como un escritor con una mentalidad y una personalidad claramente dirigida a una espiritualidad y energía en nuestro diario vivir, trata de hacer una comparación entre la sociedad occidental y la oriental, aun si no se habla en lo absoluto de esta última, claramente defiende su punto de vista evocando sentimientos en las personas al escribir la muerte que le damos al silencio como se la dimos a Jesús de Nazet, al igual que decir que las personas hablan de forma chillona y estridente y en ningún nivel de la vida se sabe hablar y mucho menos callar.

Alaba el trabajo de colegas escritores al traerlos a colación durante su ensayo y exalta el trabajo de filósofos, psicólogos, sacerdotes y maestros espirituales, todos ellos un una clara visión humanística y antropológica de por si dirigidas hacia un camino de auto evaluación y cambio a nivel personal y espiritual.